Mérida, Yucatán, 21 de junio 2017.- Manuel Cepeda Peraza general yucateco fue fundador del Instituto Literario del Estado, acontecimiento que lo hizo precursor de la educación, afirmó Raúl Vela Sosa en el Homenaje al prócer a los 150 años de la Restauración de la República.
En el Salón de Consejo del Centro Cultural Universitario se llevó a cabo una mesa panel, en la que académicos de las facultades de Economía y Ciencias Antropológicas de la UADY abordaron temáticas relevantes de Cepeda Peraza.
En su intervención Vela Sosa manifestó que varios de los hechos trascendentes que ubican a Cepeda Peraza como soldado de la República, se registraron con la culminación de su campaña militar contra las fuerzas imperiales en la península, con la capitulación de la ciudad de Mérida el 15 de junio de 1867, y al asumir el mando en calidad de Comandante Militar y Gobernador, este último cargo lo refrendaría posteriormente, al ser electo.
“Un hecho importante en la historia fue el triunfo de Cepeda Peraza en la Península, el cual contribuyó a cancelar un plan geoestratégico de las coronas europeas de constituir en el Centroamérica un reino cuya capital fuese Mérida” agregó.
En ese sentido, explicó que estando en el trono, Maximiliano envió a su esposa Carlota a un viaje estratégico a Yucatán, que tuvo como finalidad sondear en la región la factibilidad de hacer de la península un centro de atracción política de los países de América Central.
“El proyecto imperial pensado entre Napoleón III y Leopoldo I, rey de Bélgica y padre de Carlota la esposa de Maximiliano era imponer un reino en Centroamérica cuya corona ostentara uno de los hermanos de Carlota”, apuntó.
Por otro lado, resaltó que la labor realizada por Cepeda Peraza fue acertada al incluir a Yucatán al proyecto educativo republicano, fundando el Instituto Literario del Estado y la Escuela Normal para profesores. Estos acontecimientos de alcances sin precedente para la época, lo hizo trascender como el precursor de la educación, como canal de movilidad social y como medio de redistribución del ingreso.
Por su parte el profesor Adolfo Góngora López destacó, que gracias al laicismo que inició en esa época en el estado, se logró separar la iglesia y el estado, “esto fue un logro más del yucateco”, puntualizó.
El inicio de operaciones de un Instituto con las características del Literario del Estado, trajo a Yucatán una dinámica educacional consistente, fundamentalmente, en aportar nuevos conocimientos científicos y en la difusión de experiencias.